El Cerceda, clasificado por penaltis. (DDF)

Al final fue el Cerceda el que se clasificó para las semifinales de la Copa Deputación, pero sólo en la tanda de penaltis consiguió deshacerse del Racing. Fue así como se decidió un partido vibrante, de un ritmo impropio de una pretemporada y que demostró que ambos van a ser dos de los equipos más importantes de la Tercera División para la presente campaña.
Desde el primer minuto se notó que el enfrentamiento entre Cerceda y Racing excedía a la categoría de amistoso de pretemporada, porque ambos equipos jugaron a una velocidad y con un ritmo propios de dos de los que van a partir como favoritos al título de la Tercera División. En estos compases iniciales el cuadro verde, aun sin ejercer un dominio evidente, sí demostró bastante velocidad a la hora de combinar la pelota a partir del centro del campo y, junto a la presión que ejerció sobre la salida de balón del Cerceda, mantuvo la situación bastante controlada.
Fue mediada la primera parte cuando llegó la ocasión más clara a favor del Racing. Un centro desde la izquierda de Pablo Rey desde la banda izquierda fue cabeceado por Mauro Poratti, solo en el segundo palo, un poco desviado de la meta del Cerceda. Pero, sin embargo, esta opción no arredró a la escuadra local, que empezó a mejorar su nivel hasta hacerse el claro dominador de la situación hasta el descanso. Así, de manera casi inmediata, el cuadro blanquirrojo dispuso de una triple ocasión que ni Xaco ni Óscar ni Manu Barreiro fueron capaces de anotar, también en buena parte por la actuación del meta Paco Fernández. Incluso después un lanzamiento de Mariño tras un golpe franco estuvo a punto de desequilibrar el marcador, pero el partido llegó empatado, y sin goles, al intermedio.

Decorado > La igualdad que había caracterizado la primera mitad se tornó en dominio apabullante del Cerceda en los primeros minutos de la segunda parte. En ellos, el equipo local llegó con mucha claridad a la meta racinguista y, después de que Manu Barreiro no acertase a convertir un par de opciones claras, el premio llegó en una colada por la banda izquierda de Óscar que Santi Silvar tuvo que cortar haciendo penalti. Rodri fue el encargado de transformar esta pena máxima y, así, puso en una merecida ventaja al Cerceda.
La desventaja en la que el Racing estaba en el marcador motivó que Luisito empezase a dar entrada a futbolistas de corte más ofensivo –Sergio Arias ya lo había hecho al intermedio y Rafa Mella lo hizo mediada la segunda parte– en busca del empate. Y ahí el cuadro verde mejoró. La igualada llegó en una jugada a balón parado que Antonio cabeceó a la red y motivó que el partido empezase de nuevo. En este nuevo decorado, fue el cuadro verde el que pareció más entonado que un rival que parecía acusar el cansancio del esfuerzo que había realizado. Sin embargo, los esfuerzos de uno y otro no recibieron recompensa y la eliminatoria se tuvo que resolver desde los once metros.