El Racing llegó una hora tarde al partido en el que se jugaba la posibilidad de acercarse de manera casi definitiva a la permanencia. Por lo menos, no hubo noticias suyas a lo largo de la primera parte del encuentro que ayer lo enfrentó al Sevilla Atlético, que jugó contra nadie durante 45 minutos. Por eso, pese a que reaccionó en la segunda parte -más por vergüenza que por calidad-, el cuadro verde terminó perdiendo para irse con el recuerdo de lo que todo el mundo sabía: que certificar la continuidad en la categoría de plata para la próxima campaña no va a ser tarea sencilla.
Durante el encuentro de ayer, el balón le perteneció al Sevilla Atlético casi en exclusividad en la primera parte y eso, apoyado en la calidad técnica de sus hombres -el entrenador del equipo andaluz, Fermín Galeote, revolucionó su once inicial dando entrada a varios futbolistas del filial de este filial con la intención de acabar con la mala racha de resultados que atravesaba- y en su mayor costumbre a soportar el calor con el que se jugó este período inicial -nunca puede ser la excusa-, hizo que estuviese casi todo el tiempo cerca de los dominios contrarios. De hecho, el cuadro hispalense lo hizo casi todo bien en este primer período: defendió con seriedad y eficacia -sólo un disparo de Álvaro Antón y otro de Cami, ya casi llegando al descanso, supuso auténtico peligro para su portería- combinó con criterio en el mediocampo, se mostró vertical por las bandas... Sólo le faltó tener un poco de acierto en el remate para adelantarse ante un rival que no hizo más que contemplar con cierta pasividad el juego de su rival.
Lo único bueno para el Racing entonces era que el tiempo iba pasando sin que su rival convirtiese un gol, aunque también sin dar la sensación de tener la capacidad de cambiar la manera en la que se estaba desarrollando el encuentro. Así, con el descanso como paraíso soñado para el equipo ferrolano, el enfrentamiento siguió siendo un monólogo del grupo local hasta que la enésima aproximación del Sevilla Atlético permitió a Alfaro ganar (una vez más) la línea de fondo por la banda derecha y brindar un pase que, tras pasearse por delante de la portería racinguista sin que ningún futbolista lo despejase, fue rematado por Armenteros para marcar el primer tanto del encuentro. Y, aún sin reponerse de este golpe, un despiste (otro más) de Zanev lo llevó a incurrir en penalti sobre Alfaro que, lanzado por este mismo futbolista, fue desviado por Queco Piña para que, en el colmo de la falta de atención, fuese remachado por Armenteros sin oposición para dejar el partido casi sentenciado al llegar al descanso.
Control > Con esta ventaja, el Sevilla Atlético no tuvo que preocuparse en la segunda parte más que de controlar, mientras que fue el Racing el que tuvo que recomponer sus ideas y su disposición para intentar, primero, reducir distancias y, después, alcanzar el empate. Por eso, Juan Veiga dio entrada a Medina en sustitución de Rubén García con la intención de darle al equipo ferrolano más presencia en ataque y a Iván Romero en el lugar de un desafortunado Zanev. Pero, en realidad, estas variaciones no cambiaron demasiado el panorama. Sí que el Racing parecía más entonado que en la primera parte, pero a veces daba la sensanción de estar más cerca el 3-0 que el 2-1.
El partido pudo cambiar entonces en una jugada. Un penalti por manos de un futbolista del Sevilla Atlético otorgó al cuadro verde la oportunidad de reducir distancias y, además, lo situó en superioridad numérica. Sin embargo, Medina erró su lanzamiento -sí engañó al portero rival, pero su disparo se fue al poste- y la ansiada remontada se desvaneció. Porque, a partir de entonces, el partido pasó a tener menos emoción e incertidumbre por el resultado. Es cierto que el Racing fue el que dominó indiscutiblemente la situación, pero casi no fue capaz de tener opciones reales para transformar un gol.
Parecía que el partido ya estaba decidido cuando el Racing, a menos de diez minutos para el final, recobró sus opciones gracias a un tanto de Álvaro Antón. A partir de ahí, aunque el equipo ferrolano se quedó también con uno menos sobre el campo por la expulsión de Olmo, el ataque racinguista se redobló, pero era ya muy poco el tiempo que restaba para lograr otro tanto y el cuadro verde se fue con la sensación de haber perdido otra oportunidad para sentenciar una permanencia que, por lo visto, no va a ser tan secilla como se esperaba.
Sevilla Atlético: Javi Varas; Óscar Ramírez, Yedra, Cala, Gallardo; Alfaro, Jonathan, Ismael, Armenteros (Casado, min. 86); Salva Sevilla (Juanjo, min. 71) y Juan Pablo (Paco, min. 61).
Banquillo: Pablo Sánchez, Vargas (portero suplente), Juanjo, Víctor Díaz, Perotti, Casado y Paco.
Racing Club Ferrol: Queco Piña; Ceballos, Charpenet, Olmo, Zanev (Iván Romero, min. 46); Cami (Cristian Portilla, min. 70), Rubén García (Medina, min. 46), Roberto; Jonathan Pereira, Carlier y Álvaro Antón.
Banquillo: Jonathan, Chema Mato, Rubén Martínez (portero suplente), Iván Romero, Manuel, Cristian Portilla y Medina.
Árbitro: Javier Estrada Fernández (comité catalán).
Asistentes: Mario Pérez Álvarez (comité catalán) y Rómulo Álvarez Zárate (comité asturiano).
Cuarto árbitro: Daniel Jesús Trujillo Suárez (comité tinerfeño).
Tarjetas amarillas: Sevilla Atlético: Óscar Ramírez (mins. 30 y 59), Fermín Galeote -entrenador- (min. 66), Ismael (min. 79), Javi Varas (min. 79), Armenteros (min. 81). Racing Club Ferrol: Chema Mato (min. 31), Zanev (min. 36) y Jonathan Pereira (min. 52).
Tarjetas rojas: Sevilla Atlético: Óscar Ramírez (min. 59). Racing Club Ferrol: Olmo (min. 83) y Sergio Aullón -fisioterapeuta- (min. 85).
Goles:
1-0 min. 32: Armenteros.
2-0 min. 37: Armenteros.
2-1 min. 82: Álvaro Antón.
Campo: Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios
Ascenso a segunda no Jofre
Junio 2007
domingo, 27 de abril de 2008
domingo, 20 de abril de 2008
Otro empate: 0-0 de nuevo contra el Málaga
El Málaga y el Racing de Ferrol dieron un paso en sus aspiraciones, los andaluces hacia el ascenso, y los gallegos hacia la permanencia, tras igualar 0-0 en A Malata, en un encuentro marcado por las adversas condiciones meteorológicas. La intensa lluvia que cayó sobre Ferrol condicionó el desarrollo del encuentro, ya que si en los primeros compases la rapidez del césped de A Malata propició un vibrante ir y venir de una a otra área, a medida que fue encharcándose el juego fue apagándose. De este modo, las oportunidades de gol de malagueños y ferrolanos quedaron reducidas a un posible fallo propiciado por la lluvia, o bien a las jugadas de estrategia. Precisamente de un saque de falta lateral a los cuarenta y dos minutos llegó la mejor ocasión del Racing de Ferrol, que pareció sentirse más cómodo que su rival según iba empeorando el estado del terreno de juego, de toda la primera parte. El balón colgado por Álvaro Antón llegó al segundo palo donde el central Jesús Olmo remató con dificultades, viendo cómo el esférico se paseaba por delante de la meta de Goitia sin que ninguno de sus compañeros fuera capaz de remacharlo a las redes. También tuvo sus opciones el Málaga, que llegaba a A Malata con el objetivo de mantener, al menos, los ocho puntos de ventaja que contaba sobre la Real Sociedad, pero el colegiado Miranda Torres estimó juego peligroso en el intento de remate a los catorce minutos de Baha a un centro desde la izquierda de Calleja que ya había sobrepasado al meta local Queco Piña.
Nada cambia en la segunda parteTrató de recuperar la iniciativa el Málaga en la segunda mitad con la entrada de Gerardo y de Eliseu, si bien la mejor ocasión fue para el conjunto local, en una contra conducida por Jonathan Pereira, que no pudo rematar, a causa de un inoportuno resbalón, al que siguió otro del defensor andaluz, que Álvaro Antón no supo aprovechar. Una jugada que puso en alerta a ambos conjuntos sobre los peligros de tratar de combinar dado el estado del terreno, lo que propició que tanto Racing de Ferrol como Málaga apostasen por el juego en largo para evitar cualquier tipo de contratiempos. Curiosamente en una de las pocas jugadas de combinación llegó a los setenta y un minutos de juego la mejor ocasión de los gallegos en un centro desde la banda izquierda de Álvaro Antón que remató el francés Carlier en el primer palo obligando a lucirse al meta Goitia. Aunque quien estuvo más cerca del gol fue el Málaga, que buscó los tres puntos con la entrada de Salva Ballesta como compañero en la punta de ataque de Baha, primero en un despeje de Olmo a los ochenta minutos, que a punto estuvo de meter en su propia portería, y, sobre todo, en el consiguiente saque de esquina, en el que Salva envió el balón al palo de la portería defendida por Queco Piña.
Nada cambia en la segunda parteTrató de recuperar la iniciativa el Málaga en la segunda mitad con la entrada de Gerardo y de Eliseu, si bien la mejor ocasión fue para el conjunto local, en una contra conducida por Jonathan Pereira, que no pudo rematar, a causa de un inoportuno resbalón, al que siguió otro del defensor andaluz, que Álvaro Antón no supo aprovechar. Una jugada que puso en alerta a ambos conjuntos sobre los peligros de tratar de combinar dado el estado del terreno, lo que propició que tanto Racing de Ferrol como Málaga apostasen por el juego en largo para evitar cualquier tipo de contratiempos. Curiosamente en una de las pocas jugadas de combinación llegó a los setenta y un minutos de juego la mejor ocasión de los gallegos en un centro desde la banda izquierda de Álvaro Antón que remató el francés Carlier en el primer palo obligando a lucirse al meta Goitia. Aunque quien estuvo más cerca del gol fue el Málaga, que buscó los tres puntos con la entrada de Salva Ballesta como compañero en la punta de ataque de Baha, primero en un despeje de Olmo a los ochenta minutos, que a punto estuvo de meter en su propia portería, y, sobre todo, en el consiguiente saque de esquina, en el que Salva envió el balón al palo de la portería defendida por Queco Piña.
domingo, 13 de abril de 2008
Un punto importante, más cerca de la salvación : 0-0
El Racing de Ferrol ha sacado un valioso punto de cara a la permanencia en cancha de un rival directo como el Nástic, que ve ya muy complicado salvarse. Catalanes y ferrolanos empataron 0-0 en un partido sin historia y con pocas ocasiones, que sólo llegaron a balón parado y con cuenta gotas.
El Nàstic empezó con ganas; el Racing nervioso. No quería el balón en sus pies, y eso supuso que los primeros minutos fueran claramente locales, incluso creando alguna ocasión de peligro, como un lanzamiento directo desde la esquina de Campano, que casi se cuela en la puerta de Queco Piña. A los cinco minutos el Nàstic dispuso de a segunda ocasión clara. Lanzamiento de falta a cargo del propio Campano que el portero racinguista desvió a córner con apuros.
Los de Ferrando estaban más entonados y decididos a sentenciar cuanto antes. El Racing no reaccionó hasta el minuto dieciocho. Fue con un lanzamiento de falta de Charpenet que Rubén tuvo que desviar cuando se colaba en la portería. Los de Veiga despertaban y empezaban a merodear el área rival.
El partido empezó a abrirse, y aunque el dominador seguía siendo el Nàstic, el Racing también creaba oportunidades. Antón tuvo una buena ocasión en el minuto 23 que salió fuera por poco. Un minuto después Moisés reclamó al colegiado un posible penalti por una caída dentro del área y de la que Llorente Carcedo no quiso saber nada.
El Nàstic seguía insistiendo pero sin poner a prueba a Queco Pina. Tampoco ponía a prueba el Racing a Rubén, y pese a que las aproximaciones de los gallegos eran menos que las locales, éstas parecían siempre llevar más peligro.
Álvaro Atón lo tuvo, nuevamente, en sus botas a cinco minutos del descanso, con un lanzamiento de falta que lamió el palo de la portería. La réplica llegó medio minuto después. Fue Campano esta vez de falta desde la frontal, pero Queco estuvo nuevamente acertado.
La última jugada de la primera parte fue un lanzamiento de Diop dentro del área, que también estuvo a punto de entrar, pero que salió a la derecha de Pina cuando se cantaba el gol. La segunda parte se inició con la misma intensidad con la que acabó la primera y con una gran jugada de Pereira que se fue perfectamente para plantarse ante Rubén, que estuvo providencial. El Nàstic también quiso dar la suya, pero también sin suerte.
Primero una falta lanzada por Abel que Piña blocó sin problemas. Después una jugada de Maldonado dentro del área que centró desde la derecha para que Moisés rematara al larguero. A partir de ahí el partido entró en letargo, del cual sólo despertó Moisés mediada la segunda parte con un remate de cabeza completamente sólo que de forma incomprensible no entró en la portería.
Dos minutos después el colegiado no señaló un claro penalti sobre Abraham tras un lanzamiento lateral. La jugada continuó con un disparo de Moisés que Pina desvió con problemas a córner. Las jugadas y las ocasiones se fueron diluyendo hasta el final.
Gimnàstic: Rubén, Campano, Abraham, Mairata, Mingo, Abel (David Sánchez, m.77), Medina, Diop, Maldonado (Miku, m.77), Gorka (Adrián, m.66) y Moisés.
0. Racing: Queco Piña, Ceballos, Olmo, Chapernet, Zanev, Camí (Mato, m.74), Rubén, Sousa, Pereira (Jonathan, m.86), Carlier (Medina, m.67) y Antón.
Árbitro: Llorente Carcedo, del colegio de Castilla y León. Mostró cartulinas amarillas a Ceballos, Olmo, Diop, Mingo
El Nàstic empezó con ganas; el Racing nervioso. No quería el balón en sus pies, y eso supuso que los primeros minutos fueran claramente locales, incluso creando alguna ocasión de peligro, como un lanzamiento directo desde la esquina de Campano, que casi se cuela en la puerta de Queco Piña. A los cinco minutos el Nàstic dispuso de a segunda ocasión clara. Lanzamiento de falta a cargo del propio Campano que el portero racinguista desvió a córner con apuros.
Los de Ferrando estaban más entonados y decididos a sentenciar cuanto antes. El Racing no reaccionó hasta el minuto dieciocho. Fue con un lanzamiento de falta de Charpenet que Rubén tuvo que desviar cuando se colaba en la portería. Los de Veiga despertaban y empezaban a merodear el área rival.
El partido empezó a abrirse, y aunque el dominador seguía siendo el Nàstic, el Racing también creaba oportunidades. Antón tuvo una buena ocasión en el minuto 23 que salió fuera por poco. Un minuto después Moisés reclamó al colegiado un posible penalti por una caída dentro del área y de la que Llorente Carcedo no quiso saber nada.
El Nàstic seguía insistiendo pero sin poner a prueba a Queco Pina. Tampoco ponía a prueba el Racing a Rubén, y pese a que las aproximaciones de los gallegos eran menos que las locales, éstas parecían siempre llevar más peligro.
Álvaro Atón lo tuvo, nuevamente, en sus botas a cinco minutos del descanso, con un lanzamiento de falta que lamió el palo de la portería. La réplica llegó medio minuto después. Fue Campano esta vez de falta desde la frontal, pero Queco estuvo nuevamente acertado.
La última jugada de la primera parte fue un lanzamiento de Diop dentro del área, que también estuvo a punto de entrar, pero que salió a la derecha de Pina cuando se cantaba el gol. La segunda parte se inició con la misma intensidad con la que acabó la primera y con una gran jugada de Pereira que se fue perfectamente para plantarse ante Rubén, que estuvo providencial. El Nàstic también quiso dar la suya, pero también sin suerte.
Primero una falta lanzada por Abel que Piña blocó sin problemas. Después una jugada de Maldonado dentro del área que centró desde la derecha para que Moisés rematara al larguero. A partir de ahí el partido entró en letargo, del cual sólo despertó Moisés mediada la segunda parte con un remate de cabeza completamente sólo que de forma incomprensible no entró en la portería.
Dos minutos después el colegiado no señaló un claro penalti sobre Abraham tras un lanzamiento lateral. La jugada continuó con un disparo de Moisés que Pina desvió con problemas a córner. Las jugadas y las ocasiones se fueron diluyendo hasta el final.
Gimnàstic: Rubén, Campano, Abraham, Mairata, Mingo, Abel (David Sánchez, m.77), Medina, Diop, Maldonado (Miku, m.77), Gorka (Adrián, m.66) y Moisés.
0. Racing: Queco Piña, Ceballos, Olmo, Chapernet, Zanev, Camí (Mato, m.74), Rubén, Sousa, Pereira (Jonathan, m.86), Carlier (Medina, m.67) y Antón.
Árbitro: Llorente Carcedo, del colegio de Castilla y León. Mostró cartulinas amarillas a Ceballos, Olmo, Diop, Mingo
sábado, 12 de abril de 2008
Próximo objetivo: Nástic
Historia del Nástic
La segunda mitad del siglo XIX significó un cambio revolucionario para la ciudad de Tarragona, modernizándose y con un significativo crecimiento urbanístico. En el año 1854, Tarragona ya tenia 18300 habitantes, se empezó a planear la Rambla para construir lo que seria, con los años, el centro de la vida social y comercial. Dos años más tarde ya circulaba el primer ferrocarril de vapor que enlazaba Reus con Tarragona.
Desde el 1862 empezaron a salir sociedades o agrupaciones con intención recreativa, unas enfocadas a la clase media-alta i otras a las clases trabajadoras. Podemos recordar: la Hamonia, Centre Tarragoní, la Artesana, La Tertulia, l’Amistat, el Ateneo Tarraconense de la Clase Obrera, el Centre Català, Círculo Literario, Casino de la Unión Tarraconense, el Club Instructivo y el coro Àncora. Pero ninguno deportivo.
La ciudad asistió al primer acto de recreo en el 1863 con la creación de los “Campos de Recreo”, donde actualmente se encuentran las calles Maria Cristina, Hernández Sanahuja, Estanislao Figueras y Cronista Sesé. Lugar donde los domingos se podia disfrutar de un dia al aire libre. Y la prueba de que la ciudad crecía económicamente la tenemos en la creación, el año 1864, del “Banco de Tarragona”. En el siglo XIX, a principios de la década de los ochenta, se instaló el primer quiosco de venta de periódicos en la Rambla Vella. En Tarragona, se publicaban tres periódicos diarios y dos semanales. La ciudad llegó a los 18500 habitantes cuando en el año 1878, Antonio Escofet Netto, fundó el Club Náutico para potenciar la práctica del remo, la natación y la vela ligera. Esto ayudó a que en el 1882 se inauguraran los famosos “Baños del Milagro” que impulsaron la practica de la natación. La Gimnasia, origen de la fundación del Club Gimnàstic, nace con cuatro variantes: la sueca –sencilla y con la utilización de aparatos- sale a la luz hacia el 1860, la germánica, de influencia militarista, como respuesta a la sueca, hacia el 1861; la checa que eliminaba los aparatos y dejaba practicarla a la mujer, nació hacia el 1865; y la inglesa, parecida a la escandinava y que se creo en Londres hacia el 1885. El año 1884 empezó a funcionar el primer gimnasio de la ciudad, de Tomás Martí, en el número 36 de la actual Rambla Nova, en el que se impartía la gimnasia al estilo sueco. Iban estudiantes jóvenes y algunos hijos de comerciantes e industriales que habían viajado al extranjero, principalmente Francia o Inglaterra.
La ciudad pudo ver por Santa Tecla del 1881, desmontar el primer cuatro de nueve, de la Colla Vella dels Xiquets de Valls, y también carreras pedrestas donde se iba hasta las cuevas del Llorito, el Puente del Diablo o el Mas de la Marquesa. Estos hitos les podrían haber inspirado para mejorar físicamente. Aunque estas prácticas deportivas no eran bien vistas ni por el clero, ni por médicos, ni por las clases pudientes. Doce alumnos del gimnasio del señor Martí, disgustados por el método utilizado y enfadados por la poca libertad de la que disponían en el gimnasio, optaron por reunirse durante febrero de 1886 en los salones del Cafè del Centre –posteriormente Hotel Europa- en la Rambla Nova, para encontrar la manera de abrir un gimnasio nuevo. Pero no fue hasta la tercera reunión el 1 de marzo de 1886 cuando decidieron constituir un club para practicar la gimnasia, encontrar un local céntrico, fijar en 15 el número máximo de socios y darle el nombre de “Club Gimnasio”.
Parece ser que los doce no estaban totalmente de acuerdo en la formula para constituir el club. El tema económico y la falta de recursos dificultaban el desarrollo del proyecto. El 10 de marzo se volvieron a reunir acordando el alquiler del local número 16 de la Rambla Nova. El alquiler era de 25 pesetas mensuales, pero tenían que hacer una aportación de 30 pesetas para poder comprar los aparatos. Después de largas discusiones dieron luz verde al proyecto, aunque algunos tuvieron que pedir un préstamo para hacer frente el pago de las cuotas.
En la reunión del 12 de marzo, crean la primera junta y ocupan el local nuevo. El primer presidente fue un tratante de vinos de La Secuita, Joan Estil·les Portal; el secretario, Eugeni Saugar Rosselló, comerciante; y el tesorero, Francesc Rigau Marot, tenia una relojería. Los otros fundadores fueron: Josep Mª Boxó Llorens, Rafel Teixidó Martí, los hermanos Agustí y Leandre Ferré, Fulgenci Beltrán Comes, Agustí Sandoval Salas, Andreu Vilá, Josep Soliano Marot y Josep Verdú Miquel, que lo dejó en mayo por desacuerdo con el resto de compañeros.
El Club Gimnasio –hasta julio de 1893 no se diría Club Gimnástico- durante los primeros años de su fundación era una entidad privada y elitista que sólo podía aumentar en número de socios por decisión en asamblea anual. De hecho hasta el 1898 no abrió totalmente sus puertas a la libre inscripción de socios. Entonces ya contaba con 100 socios, en julio del año siguiente el club inicia su crecimiento absoluto y censa 300 socios.
Tarragona recibe el siglo XX con 23450 habitantes, y cuatro entidades deportivas en funcionamiento: Club Náutico, Club Gimnástico, Club Velocipedista y Centro Excursionista. Los colegios de la ciudad comienzan a practicar la gimnasia, y un grupo de acreditados médicos locales se manifiestan alabando las excelencias de la práctica del deporte. Los ciudadanos son asiduos a presenciar las funciones teatrales o zarzuelas, conciertos de las Bandas Militares e incluso conferencias que se imparten en las entidades culturales, pero no existía la cultura de ir a espectáculos deportivos (carreras, combates de boxeo o exhibiciones de gimnasia).
Pero sucederá un evento en 1891 que cambiará la dinámica de la vida deportiva de la ciudad. Entonces, entró al club un personaje que dará el impulso definitivo, el empujón justo para transformarlo en una entidad polideportiva. El suizo William Tarin Naurer, quien piensa que el futuro está en la diversidad, en el pluralismo deportivo y en la participación del socio como espectador de los eventos deportivos.
Relacionado con la ésta idea, el 10 de marzo de 1901, en la plaza del Progrés – actual plaza Corsini- se juega el primer partido de fútbol entre la Asociación Football Club – Tarragona- y el Sporting Football Intrépido – Barcelona-, con el triunfo barcelonés por 2 a 5. William Tarín impulsó la entra de los nuevos deportes en el club.
El club a partir de la llegada de diferentes deportes a España y Cataluña, ya se apuntó al gran “boom” del deporte en todo el mundo, nacen pausadamente diferentes secciones. A partir de la Gimnasia – practicada por una cincuentena de socios-, Esgrima que entró en 1890, el Frontón, en 1908, el Atletismo en 1912, el Ciclismo y Fútbol en 1914, Excursionismo y Tenis en 1915, Lucha en 1918, Boxeo en 1922, Hockey Tierra en 1923, Baloncesto 1929, Náutica en 1931, Tenis de mesa en 1939, Hockey Patines en 1943, Rítmica en 1980, Balonmano en 1982 y Fútbol Sala en 1994.
El fútbol costó de ser aceptado dentro del club. William Tarín estaba muy interesado en la creación de un equipo de fútbol porque pensaba – con buen criterio- que era el deporte del futuro. En Tarragona aquellos años se formó incluso una docena de equipos diferentes con una vida efímera. En 1909 hubo el primer intento de constituir un equipo, incluso jugaron dos partidos pero los jugadores del Olímpic, Stadium y Hispania no aceptaron hacerse socios del Gimnàstic para competir.
En 1912 hubo otro intento, pero en ésta ocasión la asamblea de socios del club no lo vio con buenos ojos. Finalmente, en diciembre de 1914 se constituyó la sección de fútbol absorbiendo el equipo del Olímpic aprovechando sus camisetas rojas y pantalón negro. También se añadieron unos jugadores del Stadium que ya llevaba uno par de años sin jugar.
Durante los años 1915 y 1916, el equipo de fútbol del Gimnàstic solo jugó partidos amistosos, en algunos de los cuales lució unas camisetas blanquiazules. En 1916 se inscribió en el Campeonato de Cataluña de Segunda Categoría, grupo B, pero no llegó a comenzar la competición por falta de equipos. La segunda temporada compitió por primera vez de manera oficial. El 13 de enero de 1918 el Nàstic empató a dos goles contra el Vilanova. Era el primera partido oficial de los “granas” en Segunda Liga del Campeonato de Cataluña.
Los primeros partidos los jugó en el campo de la calle Estanislao Figueres, hasta el año 1922, en un terreno de juego que tenía unos 95 metros de largo por 70 de ancho. En agosto del 1922 se inauguró en la Avenida de Cataluña, un campo de capacidad para 9000 espectadores que duró hasta el 1972 en que se inauguró el Nou Estadi actual.
Todo y que el Nàstic comenzó a competir en categorías regionales la temporada 1917/1978, a partir del final de la Guerra Civil, cuando se consolida en las principales categorías. Así, a partir de la campaña de 1939/40 ha jugado 2386 partidos de liga, 1033 ganados, 589 empatados, 764 perdidos, ha marcado 3607 goles y ha encajado 2961. Ha alineado 1004 jugadores y lo han dirigido 50 entrenadores.
La temporada 2005-2006, la del ascenso a 1ª División, refuerza una etapa histórica dentro de la dilatada trayectoria del Nàstic. La masa social aumenta espectacularmente, con un incremento de socios y de simpatizantes. Como valor demostrativo, durante el partido que dio el ascenso al Nàstic, en Jerez, más de 12000 personas lo siguieron en la plaza de la Font a través de una pantalla gigante y alrededor de 40000, siguieron la espectacular rúa por el centro de la ciudad.
Durante la campaña 2005/06 se pulverizaron todos los récords, en lo referente a desplazamientos masivos de seguidores. En Lérida, fueron 6000 los que acompañaron al equipo. 2000 en Castellón. 1600 en Valencia, contra el Levante, por citar algunos ejemplos.
Actualmente el Gimnàstic de Tarragona, S.A.D. cuenta con 12.000 socios, casi el doble de hace una año.
Desde el 1862 empezaron a salir sociedades o agrupaciones con intención recreativa, unas enfocadas a la clase media-alta i otras a las clases trabajadoras. Podemos recordar: la Hamonia, Centre Tarragoní, la Artesana, La Tertulia, l’Amistat, el Ateneo Tarraconense de la Clase Obrera, el Centre Català, Círculo Literario, Casino de la Unión Tarraconense, el Club Instructivo y el coro Àncora. Pero ninguno deportivo.
La ciudad asistió al primer acto de recreo en el 1863 con la creación de los “Campos de Recreo”, donde actualmente se encuentran las calles Maria Cristina, Hernández Sanahuja, Estanislao Figueras y Cronista Sesé. Lugar donde los domingos se podia disfrutar de un dia al aire libre. Y la prueba de que la ciudad crecía económicamente la tenemos en la creación, el año 1864, del “Banco de Tarragona”. En el siglo XIX, a principios de la década de los ochenta, se instaló el primer quiosco de venta de periódicos en la Rambla Vella. En Tarragona, se publicaban tres periódicos diarios y dos semanales. La ciudad llegó a los 18500 habitantes cuando en el año 1878, Antonio Escofet Netto, fundó el Club Náutico para potenciar la práctica del remo, la natación y la vela ligera. Esto ayudó a que en el 1882 se inauguraran los famosos “Baños del Milagro” que impulsaron la practica de la natación. La Gimnasia, origen de la fundación del Club Gimnàstic, nace con cuatro variantes: la sueca –sencilla y con la utilización de aparatos- sale a la luz hacia el 1860, la germánica, de influencia militarista, como respuesta a la sueca, hacia el 1861; la checa que eliminaba los aparatos y dejaba practicarla a la mujer, nació hacia el 1865; y la inglesa, parecida a la escandinava y que se creo en Londres hacia el 1885. El año 1884 empezó a funcionar el primer gimnasio de la ciudad, de Tomás Martí, en el número 36 de la actual Rambla Nova, en el que se impartía la gimnasia al estilo sueco. Iban estudiantes jóvenes y algunos hijos de comerciantes e industriales que habían viajado al extranjero, principalmente Francia o Inglaterra.
La ciudad pudo ver por Santa Tecla del 1881, desmontar el primer cuatro de nueve, de la Colla Vella dels Xiquets de Valls, y también carreras pedrestas donde se iba hasta las cuevas del Llorito, el Puente del Diablo o el Mas de la Marquesa. Estos hitos les podrían haber inspirado para mejorar físicamente. Aunque estas prácticas deportivas no eran bien vistas ni por el clero, ni por médicos, ni por las clases pudientes. Doce alumnos del gimnasio del señor Martí, disgustados por el método utilizado y enfadados por la poca libertad de la que disponían en el gimnasio, optaron por reunirse durante febrero de 1886 en los salones del Cafè del Centre –posteriormente Hotel Europa- en la Rambla Nova, para encontrar la manera de abrir un gimnasio nuevo. Pero no fue hasta la tercera reunión el 1 de marzo de 1886 cuando decidieron constituir un club para practicar la gimnasia, encontrar un local céntrico, fijar en 15 el número máximo de socios y darle el nombre de “Club Gimnasio”.
Parece ser que los doce no estaban totalmente de acuerdo en la formula para constituir el club. El tema económico y la falta de recursos dificultaban el desarrollo del proyecto. El 10 de marzo se volvieron a reunir acordando el alquiler del local número 16 de la Rambla Nova. El alquiler era de 25 pesetas mensuales, pero tenían que hacer una aportación de 30 pesetas para poder comprar los aparatos. Después de largas discusiones dieron luz verde al proyecto, aunque algunos tuvieron que pedir un préstamo para hacer frente el pago de las cuotas.
En la reunión del 12 de marzo, crean la primera junta y ocupan el local nuevo. El primer presidente fue un tratante de vinos de La Secuita, Joan Estil·les Portal; el secretario, Eugeni Saugar Rosselló, comerciante; y el tesorero, Francesc Rigau Marot, tenia una relojería. Los otros fundadores fueron: Josep Mª Boxó Llorens, Rafel Teixidó Martí, los hermanos Agustí y Leandre Ferré, Fulgenci Beltrán Comes, Agustí Sandoval Salas, Andreu Vilá, Josep Soliano Marot y Josep Verdú Miquel, que lo dejó en mayo por desacuerdo con el resto de compañeros.
El Club Gimnasio –hasta julio de 1893 no se diría Club Gimnástico- durante los primeros años de su fundación era una entidad privada y elitista que sólo podía aumentar en número de socios por decisión en asamblea anual. De hecho hasta el 1898 no abrió totalmente sus puertas a la libre inscripción de socios. Entonces ya contaba con 100 socios, en julio del año siguiente el club inicia su crecimiento absoluto y censa 300 socios.
Tarragona recibe el siglo XX con 23450 habitantes, y cuatro entidades deportivas en funcionamiento: Club Náutico, Club Gimnástico, Club Velocipedista y Centro Excursionista. Los colegios de la ciudad comienzan a practicar la gimnasia, y un grupo de acreditados médicos locales se manifiestan alabando las excelencias de la práctica del deporte. Los ciudadanos son asiduos a presenciar las funciones teatrales o zarzuelas, conciertos de las Bandas Militares e incluso conferencias que se imparten en las entidades culturales, pero no existía la cultura de ir a espectáculos deportivos (carreras, combates de boxeo o exhibiciones de gimnasia).
Pero sucederá un evento en 1891 que cambiará la dinámica de la vida deportiva de la ciudad. Entonces, entró al club un personaje que dará el impulso definitivo, el empujón justo para transformarlo en una entidad polideportiva. El suizo William Tarin Naurer, quien piensa que el futuro está en la diversidad, en el pluralismo deportivo y en la participación del socio como espectador de los eventos deportivos.
Relacionado con la ésta idea, el 10 de marzo de 1901, en la plaza del Progrés – actual plaza Corsini- se juega el primer partido de fútbol entre la Asociación Football Club – Tarragona- y el Sporting Football Intrépido – Barcelona-, con el triunfo barcelonés por 2 a 5. William Tarín impulsó la entra de los nuevos deportes en el club.
El club a partir de la llegada de diferentes deportes a España y Cataluña, ya se apuntó al gran “boom” del deporte en todo el mundo, nacen pausadamente diferentes secciones. A partir de la Gimnasia – practicada por una cincuentena de socios-, Esgrima que entró en 1890, el Frontón, en 1908, el Atletismo en 1912, el Ciclismo y Fútbol en 1914, Excursionismo y Tenis en 1915, Lucha en 1918, Boxeo en 1922, Hockey Tierra en 1923, Baloncesto 1929, Náutica en 1931, Tenis de mesa en 1939, Hockey Patines en 1943, Rítmica en 1980, Balonmano en 1982 y Fútbol Sala en 1994.
El fútbol costó de ser aceptado dentro del club. William Tarín estaba muy interesado en la creación de un equipo de fútbol porque pensaba – con buen criterio- que era el deporte del futuro. En Tarragona aquellos años se formó incluso una docena de equipos diferentes con una vida efímera. En 1909 hubo el primer intento de constituir un equipo, incluso jugaron dos partidos pero los jugadores del Olímpic, Stadium y Hispania no aceptaron hacerse socios del Gimnàstic para competir.
En 1912 hubo otro intento, pero en ésta ocasión la asamblea de socios del club no lo vio con buenos ojos. Finalmente, en diciembre de 1914 se constituyó la sección de fútbol absorbiendo el equipo del Olímpic aprovechando sus camisetas rojas y pantalón negro. También se añadieron unos jugadores del Stadium que ya llevaba uno par de años sin jugar.
Durante los años 1915 y 1916, el equipo de fútbol del Gimnàstic solo jugó partidos amistosos, en algunos de los cuales lució unas camisetas blanquiazules. En 1916 se inscribió en el Campeonato de Cataluña de Segunda Categoría, grupo B, pero no llegó a comenzar la competición por falta de equipos. La segunda temporada compitió por primera vez de manera oficial. El 13 de enero de 1918 el Nàstic empató a dos goles contra el Vilanova. Era el primera partido oficial de los “granas” en Segunda Liga del Campeonato de Cataluña.
Los primeros partidos los jugó en el campo de la calle Estanislao Figueres, hasta el año 1922, en un terreno de juego que tenía unos 95 metros de largo por 70 de ancho. En agosto del 1922 se inauguró en la Avenida de Cataluña, un campo de capacidad para 9000 espectadores que duró hasta el 1972 en que se inauguró el Nou Estadi actual.
Todo y que el Nàstic comenzó a competir en categorías regionales la temporada 1917/1978, a partir del final de la Guerra Civil, cuando se consolida en las principales categorías. Así, a partir de la campaña de 1939/40 ha jugado 2386 partidos de liga, 1033 ganados, 589 empatados, 764 perdidos, ha marcado 3607 goles y ha encajado 2961. Ha alineado 1004 jugadores y lo han dirigido 50 entrenadores.
La temporada 2005-2006, la del ascenso a 1ª División, refuerza una etapa histórica dentro de la dilatada trayectoria del Nàstic. La masa social aumenta espectacularmente, con un incremento de socios y de simpatizantes. Como valor demostrativo, durante el partido que dio el ascenso al Nàstic, en Jerez, más de 12000 personas lo siguieron en la plaza de la Font a través de una pantalla gigante y alrededor de 40000, siguieron la espectacular rúa por el centro de la ciudad.
Durante la campaña 2005/06 se pulverizaron todos los récords, en lo referente a desplazamientos masivos de seguidores. En Lérida, fueron 6000 los que acompañaron al equipo. 2000 en Castellón. 1600 en Valencia, contra el Levante, por citar algunos ejemplos.
Actualmente el Gimnàstic de Tarragona, S.A.D. cuenta con 12.000 socios, casi el doble de hace una año.
En la campaña anterior, en primera division no tuvo muchas oportunidades y terminó volviendo a la segunda division por la puerta de atrás.
jueves, 10 de abril de 2008
Lástima: deportivo clasificado por penaltys; 0-0
No pasará a la historia este primer partido de una Copa Galiza montada tarde, mal y en un momento inoportuno de la temporada. El Deportivo superó al Racing en la tanda de penaltis gracias a dos paradas de Munúa. Ahora visitará al Negreira, que superó en los penaltis al Lugo tras el 3-3 inicial. Será el 16 o el 23 de este mes.
A la primera parte le faltó una marcha. El Dépor salió con cuatro defensas y un rombo en el mediocampo, con Valerón más adelantado, mientras que el Racing mantuvo su dibujo con tres medios defensivos, aunque Cohen tenía mucha llegada.
De entrada, casi todo se redujo a tiros desde fuera del área, con el Dépor liderado por Valerón y el Racing abusando de los balones largos a Corredoira, que volvía tras ocho meses de baja por una lesión de rodilla. El lanzamiento más peligroso lo firmó Cristian, bastante activo en Ferrol. Al descanso se llegó con tablas, también en los goles anulados, primero tras un cabezazo de Taborda y después cuando Repi aprovechó un rechace de Munúa a un tiro de Lamatina.
El segundo tiempo mantuvo el mismo ritmo cansino entre dos equipos descosidos, con futbolistas que apenas se entendían porque apenas juegan juntos, como uno de esos bolos de la selección española. Sí estuvieron atentos los porteros en dos acciones aisladas: Munúa sacó una buena mano tras un remate de Cohen dentro del área, y Rubén salió oportuno a tapar un remate de Bodipo en el área. Poco más. El festival de cambios -con la entrada de varios fabrilistas- no contribuyó a cambiar la pinta del partido. El Dépor combinaba en busca de huecos en la defensa ferrolana y el Racing jugaba algo más vertical, aunque el resultado era el mismo. Con los cambios, el Racing tuvo el control, pero el gol no llegaría.
A la primera parte le faltó una marcha. El Dépor salió con cuatro defensas y un rombo en el mediocampo, con Valerón más adelantado, mientras que el Racing mantuvo su dibujo con tres medios defensivos, aunque Cohen tenía mucha llegada.
De entrada, casi todo se redujo a tiros desde fuera del área, con el Dépor liderado por Valerón y el Racing abusando de los balones largos a Corredoira, que volvía tras ocho meses de baja por una lesión de rodilla. El lanzamiento más peligroso lo firmó Cristian, bastante activo en Ferrol. Al descanso se llegó con tablas, también en los goles anulados, primero tras un cabezazo de Taborda y después cuando Repi aprovechó un rechace de Munúa a un tiro de Lamatina.
El segundo tiempo mantuvo el mismo ritmo cansino entre dos equipos descosidos, con futbolistas que apenas se entendían porque apenas juegan juntos, como uno de esos bolos de la selección española. Sí estuvieron atentos los porteros en dos acciones aisladas: Munúa sacó una buena mano tras un remate de Cohen dentro del área, y Rubén salió oportuno a tapar un remate de Bodipo en el área. Poco más. El festival de cambios -con la entrada de varios fabrilistas- no contribuyó a cambiar la pinta del partido. El Dépor combinaba en busca de huecos en la defensa ferrolana y el Racing jugaba algo más vertical, aunque el resultado era el mismo. Con los cambios, el Racing tuvo el control, pero el gol no llegaría.
miércoles, 9 de abril de 2008
Otro derby!!! A seguir la racha
Cuatro días después de enfrentarse (y derrotar) al Celta de Vigo, el Racing juega contra el Deportivo, el otro “grande” del fútbol gallego. Con motivo de la Copa Galiza, el equipo ferrolano disputa esta tarde-noche -20.45 horas, A Malata- el partido más atractivo de los cuartos de final de este torneo, porque mide al que en la actualidad es uno de los mejores de la liga BBVA con el único representante gallego de Primera que, además, atraviesa por un momento dulce. Por eso, gracias a estas buenas rachas, las dos formaciones han sentado las bases para continuar en sus respectivas categorías en la próxima temporada.
La cita servirá para que tanto el entrenador racinguista, Juan Veiga, como el deportivista, Miguel Ángel Lotina, concedan minutos de competición a los futbolistas que menos han jugado hasta ahora -Rubén Martínez, Repi, Keita, Cohen o Lamatina en el cuadro verde o Barragán, Verdú, Cristian Hidalgo, Adrián o Bodipo en el blanquiazul- de cara a los próximos compromisos ligueros, en los que pretenden asegurar sus objetivos. Así, este domingo, el Racing se enfrenta a domicilio al Nàstic de Tarragona, un enemigo directo en la lucha por la salvación, mientras que el Deportivo juega en su feudo contra el Athletic que, aunque más liberado de urgencias en la clasificación, también lucha por seguir en la máxima categoría.
Pero, además, el encuentro servirá también para ver de nuevo en acción a Paco Corredoira, lesionado de gravedad en la pretemporada y que hoy volverá a vestirse de corto, siete meses después. Del nivel que muestre hoy se desprenderá si se encuentra en condiciones de ayudar al equipo ferrolano en la para final de la competición liguera, en la que el Racing busca la permanencia en la liga BBVA.
Ambiente > El enfrentamiento entre Racing y Deportivo también propiciará que en A Malata vuelva a sentirse el ambiente de rivalidad que siempre deparan estos partidos. Aunque se trata de una competición menor, la visita del rival herculino siempre da un plus de motivación a futbolistas y aficionados, lo que motiva que, aunque no se espere una entrada demasiado importante, sí sea suficiente para darle un buen aspecto al estadio ferrolano. Además, el incentivo económico por ganar -6.000 euros- animará a ambas escuadras a conseguir la victoria. 44Deportes Diario de Ferrol Miércoles, 9 de abril de 2008
La cita servirá para que tanto el entrenador racinguista, Juan Veiga, como el deportivista, Miguel Ángel Lotina, concedan minutos de competición a los futbolistas que menos han jugado hasta ahora -Rubén Martínez, Repi, Keita, Cohen o Lamatina en el cuadro verde o Barragán, Verdú, Cristian Hidalgo, Adrián o Bodipo en el blanquiazul- de cara a los próximos compromisos ligueros, en los que pretenden asegurar sus objetivos. Así, este domingo, el Racing se enfrenta a domicilio al Nàstic de Tarragona, un enemigo directo en la lucha por la salvación, mientras que el Deportivo juega en su feudo contra el Athletic que, aunque más liberado de urgencias en la clasificación, también lucha por seguir en la máxima categoría.
Pero, además, el encuentro servirá también para ver de nuevo en acción a Paco Corredoira, lesionado de gravedad en la pretemporada y que hoy volverá a vestirse de corto, siete meses después. Del nivel que muestre hoy se desprenderá si se encuentra en condiciones de ayudar al equipo ferrolano en la para final de la competición liguera, en la que el Racing busca la permanencia en la liga BBVA.
Ambiente > El enfrentamiento entre Racing y Deportivo también propiciará que en A Malata vuelva a sentirse el ambiente de rivalidad que siempre deparan estos partidos. Aunque se trata de una competición menor, la visita del rival herculino siempre da un plus de motivación a futbolistas y aficionados, lo que motiva que, aunque no se espere una entrada demasiado importante, sí sea suficiente para darle un buen aspecto al estadio ferrolano. Además, el incentivo económico por ganar -6.000 euros- animará a ambas escuadras a conseguir la victoria. 44Deportes Diario de Ferrol Miércoles, 9 de abril de 2008
sábado, 5 de abril de 2008
VICTORIA!!!! El derby fue racinguista 2-1
El Racing de Ferrol despide al Celta de sus opcines de ascenso y sube un peldaño más camino a la permanencia después de ganar en el derbi gallego de Segunda. Un gran gol de Chema Mato y una indecisión entre Rosada y Esteban que permitió el gol de Álvaro Antón sentenciaron a un equipo vigués cuya lamentable segunda parte hundió sus pocas oportunidades de entrar en la lucha por los tres primeros puestos.
El Celta reaccionó pronto a los goles del Racing, en la primera parte gracias a Rosada y en la segunda con Diego Costa, que tuvo una gran ocasión en un mano a mano con Queco Piña poco después del gol de Antón. Pero no acertó y el Celta cayó en A Malata contra un Racing que respira tras dos victorias consecutivas a los dos ex primeras Real Sociedad y Celta por idéntico marcador.
Resultados que hablan del afán de supervivencia de un equipo que el pasado mes de enero parecía completamente desahuciado y hundido en la última plaza, tras encadenar quince jornadas consecutivas sin vencer, las siete últimas con derrota.
El Celta pareció arrancar con ventaja, tras anular la ventaja inicial de los locales, con una polémica jugada, dadas las dudas existentes, sobre si el remate de Rosada traspasó o no totalmente la línea de gol. Los locales no dudaron en convertir los segundos cuarenta y cinco minutos en un constante ir y venir de un área a otra, en el que la fe de los ferrolanos valió más que la mayor calidad técnica de los vigueses.
Aunque no estuvo exento de calidad el gol de Álvaro Antón, que puso el definitivo 2-1 a los setenta y un minutos con un lanzamiento de falta desde el pico izquierdo del área viguesa, que tras tocar ligeramente en el argentino Ariel Rosada, se coló en la portería defendida por Esteban. Un tanto que hizo justicia a la mayor astucia del cuadro local, que llevó en todo momento el encuentro a donde mejor se mueve, en el vertiginoso ritmo al que son capaces de actuar jugadores como Jonathan Pereira y Álvaro
El Celta tan sólo tuvo una ocasión, dos minutos más tarde del gol del Racing, para reengancharse al partido, en un mano a mano entre el brasileño Diego Costa y el cancerbero local Queco Piña, que despejó el balón a córner. Pobre bagaje en la segunda mitad para el cuadro vigués, que desde el pitido inicial cayó en la trampa propuesta por el Racing de Ferrol, que no dudó en ceder en la primera parte la iniciativa y el balón al Celta, en espera de sorprender al contragolpe.
Ficha técnica:
2 - Racing de Ferrol: Queco Piña; Ceballos, Charpenet, Olmo, Zanev; Cami, Rubén García, Chema Mato (Portilla, m.46); Jonathan Pereira (Manuel Castiñeiras, m.80), Carlier (Cacique Medina, m.77)y Álvaro Antón.
1 - Celta de Vigo: Esteban; George Lucas, Rubén, Agus, Roberto Lago; Núñez (Quincy, m.83), Michu (Mario Suárez, m.75), Rosada, Jorge; Diego Costa y Perera (Okkas, m.75).
Goles: 1-0, m.19: Chema Mato. 1-1, m.29: Rosada. 2-1, m.71: Álvaro Antón.
Árbitro: Hevia Obras (Comité madrileño). Mostró tarjeta amarilla a Charpenet, Chema Mato, Carlier y al técnico Juan Veiga por el Racing de Ferrol; y a Rosada, Roberto Lago, Jorge Larena y Núñez por el Celta de Vigo.
El Celta reaccionó pronto a los goles del Racing, en la primera parte gracias a Rosada y en la segunda con Diego Costa, que tuvo una gran ocasión en un mano a mano con Queco Piña poco después del gol de Antón. Pero no acertó y el Celta cayó en A Malata contra un Racing que respira tras dos victorias consecutivas a los dos ex primeras Real Sociedad y Celta por idéntico marcador.
Resultados que hablan del afán de supervivencia de un equipo que el pasado mes de enero parecía completamente desahuciado y hundido en la última plaza, tras encadenar quince jornadas consecutivas sin vencer, las siete últimas con derrota.
El Celta pareció arrancar con ventaja, tras anular la ventaja inicial de los locales, con una polémica jugada, dadas las dudas existentes, sobre si el remate de Rosada traspasó o no totalmente la línea de gol. Los locales no dudaron en convertir los segundos cuarenta y cinco minutos en un constante ir y venir de un área a otra, en el que la fe de los ferrolanos valió más que la mayor calidad técnica de los vigueses.
Aunque no estuvo exento de calidad el gol de Álvaro Antón, que puso el definitivo 2-1 a los setenta y un minutos con un lanzamiento de falta desde el pico izquierdo del área viguesa, que tras tocar ligeramente en el argentino Ariel Rosada, se coló en la portería defendida por Esteban. Un tanto que hizo justicia a la mayor astucia del cuadro local, que llevó en todo momento el encuentro a donde mejor se mueve, en el vertiginoso ritmo al que son capaces de actuar jugadores como Jonathan Pereira y Álvaro
El Celta tan sólo tuvo una ocasión, dos minutos más tarde del gol del Racing, para reengancharse al partido, en un mano a mano entre el brasileño Diego Costa y el cancerbero local Queco Piña, que despejó el balón a córner. Pobre bagaje en la segunda mitad para el cuadro vigués, que desde el pitido inicial cayó en la trampa propuesta por el Racing de Ferrol, que no dudó en ceder en la primera parte la iniciativa y el balón al Celta, en espera de sorprender al contragolpe.
Ficha técnica:
2 - Racing de Ferrol: Queco Piña; Ceballos, Charpenet, Olmo, Zanev; Cami, Rubén García, Chema Mato (Portilla, m.46); Jonathan Pereira (Manuel Castiñeiras, m.80), Carlier (Cacique Medina, m.77)y Álvaro Antón.
1 - Celta de Vigo: Esteban; George Lucas, Rubén, Agus, Roberto Lago; Núñez (Quincy, m.83), Michu (Mario Suárez, m.75), Rosada, Jorge; Diego Costa y Perera (Okkas, m.75).
Goles: 1-0, m.19: Chema Mato. 1-1, m.29: Rosada. 2-1, m.71: Álvaro Antón.
Árbitro: Hevia Obras (Comité madrileño). Mostró tarjeta amarilla a Charpenet, Chema Mato, Carlier y al técnico Juan Veiga por el Racing de Ferrol; y a Rosada, Roberto Lago, Jorge Larena y Núñez por el Celta de Vigo.
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